Si no es la Copa Argentina, es la pretemporada. De una u otra manera, Atlético encuentra la ineludible forma de ir a Salta en los últimos años. Ayer, volvió a cumplir parte de su tradición de viajar a la vecina provincia para comenzar con la parte fuerte de los trabajos preparatorios de cara a la temporada 2019/20.

Luego del almuerzo en el complejo de Ojo de Agua, la delegación compuesta por 27 jugadores, seis integrantes del cuerpo técnico, cuatro del cuerpo médico, dos utileros y dos dirigentes, partió a Salta, a donde arribó por la tarde. Específicamente llegó al Hotel de la Liga. Porque si Salta se ha transformado en la segunda casa de Atlético, su habitación en esa casa es ese hotel. Si bien cuando empezó a ir (allá por comienzos de los 2000), se solía hospedar en el centro y entrenaba en el complejo de los Profesionales o en el Confraternidad, desde hace rato que el de la Liga es su favorito.

Allí mismo se aloja y entrena, sin necesidad de trasladarse. Ubicado sobre la ruta que va al aeropuerto y un poco alejado de la ciudad, el “Decano” encontró su lugar. Ayer, los jugadores llegaron, merendaron allí mismo y se retiraron a descansar a sus habitaciones.

Antes, habían sido recibidos por algunos de los miembros de la Peña Salteña “Jerónimo José” que, ayudados por los empleados del hotel, colgaron carteles y pusieron banners para que el equipo se sienta como en casa. Entre ellos estaba un grupo de niños que acompañaba a los miembros más veteranos y que saludaron a las figuras del equipo.

El primer entrenamiento en tierras salteñas será a las 8.30 en la cancha principal del hotel y no será el único del día. El grupo de preparadores físicos comandado por Alfonso Meoni diagramó un trabajo que incluirá doble turno casi todos los días pero, como viene sucediendo, habrá contacto con la pelota, sin dudas.

El domingo seguramente será un día libre para que el plantel pueda salir de su búnker y recorrer algo de la capital. Esta vez quedará para otro momento otra visita típica del equipo en Salta: jugar en el estadio “Padre Martearena”. La Copa Argentina también se ha encargado, con la organización de partidos allí, de convertir este viaje en una tradición y en la provincia, en la segunda casa de este siglo para Atlético.

No habrá visita al estadio porque no habrá partidos oficiales que jugar pero ese contacto con la pelota se irá intensificando con miras al viernes 12, el día señalado para el regreso del equipo a la provincia. Y si bien el club tiene amistosos previstos en su viaje a Buenos Aires (del 15 al 20 de este mes, según confirmó el propio Ricardo Zielinski), aún no se descarta que el equipo rompa con la sequía de partidos (no juega uno desde el 25 de mayo pasado ante Tigre) con un equipo salteño, como también suele hacerlo cada vez que hace parte de su pretemporada en Salta.

Serán casi dos semanas para ponerse a punto en un lugar cercano y que es más que familiar para Atlético.